ENGLISH

Extremadura no es Castilla, no es León, no es Andalucía, no es Portugal. Los extremeños saben lo que no son, pero les resulta trabajoso saber lo que son. Fueron un pasillo, una frontera, un cruce de caminos, un corral de invierno, un entramado de razas, una sangre universal. Hoy son un sentimiento a la busca de su forma, un latido con arritmia, un larvario proyecto. Una historia por escribir.

Víctor Chamorro

Es una plataforma de investigación y creación transdisciplinar que pone la tierra en el centro de su actividad.

Esto implica, en primer lugar, atender la crisis ecológica que afecta al planeta.

Implica entender el campo y la agricultura sostenible como una posibilidad de futuro.

Implica emprender acciones locales concretas que, por modestas que sean, contribuyan a un cambio de modelo.

Partiendo de la consideración de que la memoria de un territorio puede ser una herramienta emancipadora, desde el Instituto de la tierra proponemos impulsar un proceso de reflexión respecto a la tierra como espacio de disenso, disputa y conflicto social.

No es posible abordar la actual emergencia medioambiental sin realizar una revisión crítica de los paradigmas económicos y sociales que han estructurado la vida en el entorno rural y, particularmente, en el campo extremeño.

Sin pretensiones universalistas ni redentoras, el Instituto de la tierra plantea constituir un área de protección ecosocial en la finca el Planchón, en la comarca de la Jara cacereña.

Sus diferentes acciones artísticas, pedagógicas, científicas y culturales quieren contribuir a la creación de un modelo sostenible que proteja la naturaleza y los medios para la reproducción de la vida en la comarca.

Con este fin, se ofrece como un laboratorio de pensamiento y de experimentación abierto a disciplinas, prácticas y saberes provenientes tanto desde marcos de conocimiento institucionales como desde fuera de ellos.